Esta meditación de 45 minutos es un encuentro entre el participante y el cosmos. Ayuda a fusionarse, disolverse y soltarse al nivel más profundo posible. En la primera etapa el cuerpo esta suelto y receptivo para que poco a poco comience a moverse por sí mismo (Latihan). En la segunda fase se toma la energía del cielo y se entrega a la tierra. Siendo uno solamente una caña de bambú vacío por donde pasa la energía.
Primera fase: 30 minutos
Párate con los ojos cerrados, permitiendo a tu cuerpo estar suelto y receptivo, esperando y cooperando cuando sientas que tu cuerpo comienza a moverse por sí mismo. Cuando tu cuerpo esta
relajado, permite que las energías sutiles que están fuera de tu control lo muevan. Permítele a tu posibilidad más alta tomar posesión de tu cuerpo. Solamente concede que suceda. Esto es
latihan.
Segunda fase: 15 minutos
Arrodíllate, ojos cerrados, alza las manos hacia el cielo, las palmas hacías arriba, tu cabeza como la boca de un frasco vacío, tu cuerpo hueco. Siente la energía llenando. Permítele penetrar lo
más profundo posible en tu cuerpo, mente y alma. Tu cuerpo comenzará a temblar y vibrar, como una hoja con un fuerte viento. Después de dos o tres minutos, cuando te sientas completamente lleno,
inclínate hacías adelante y descansa tu cabeza sobre el suelo. Ahora vierte la energía en la tierra; tómala del cielo y devuélvela a la tierra. Repite este proceso por lo menos seis veces
más.